Vistas de página en total

lunes, 21 de marzo de 2016

No soy yo, eres tú

Día 11.853. Otro príncipe-sapo más que se va por patas a la mínima señal de que el deshielo de su corazón-iceberg es un hecho, como el cambio climático. “Pues bueno, vale”, piensas mirándote las ojeras y la resignación en el espejo del baño. Luego miras un poco más abajo. La sonrisa. Tú siempre sonríes, aunque esté nublado, aunque se te cale el coche o se te rompa el paraguas, aunque haya cola en el súper. ¿Y a él? A él le sonreíste siempre, aunque llegara tarde, aunque tardara en contestar, aunque el icono-beso del WhatsApp que te mandaba fuera de vacile.


¿Y de qué ha servido? De poco, de nada; otra espantada más. Siembras sonrisas y recoges ganas de llorar. Y lloras, aunque no se debería llorar por lo que no se entiende.

Sigues mirándote en el espejo, más abajo; eres maja y lo sabes. Eres maja por fuera, pero sobre todo por dentro. Eres buena, aunque a veces te canses de serlo, aunque te sientas como la pringada del cuento, aunque a veces te entren ganas de gritarle a alguna bestia sin corona que, si te coge entre sus manos peludas, no te quedarás calva de pétalos. Que ser sensible no es lo mismo que ser frágil, que enamorarse no es perder el juego, que la ilusión es peligrosa porque te infla como un globo, pero el miedo lo es más porque te deja sin aire.

Vuelves a mirarte. Un poco más, a los ojos, todavía un poco más adentro. Eres tú, la niña, la adolescente, la mujer, la que dijo sí mil veces. Da igual que en otras ocasiones hayas perseguido lo imposible, que hayas metido la pata, que hayas insistido hasta sentirte ridícula o hayas cruzado el límite entre la paciencia y el autoengaño. Dan igual el resto de días. Hoy es hoy. No es ayer, ni es mañana. Hoy el mundo puede seguir sin sapos, sin bestias, sin coronas; hoy eres una princesa-guerrera con una sonrisa por espada. No es complaciente, no quiere agradar, es una sonrisa que cura, que celebra, que recuerda, que se ríe de todo aquel que te dejó marchar; que se despide de ellos, porque todos lo que se marchan, no se quedan y todos lo que no se quedan, no te merecen.


Te miras por fuera y por dentro, tan cerca del espejo que empieza a empañarse por tu respiración. Te pintas la sonrisa de algún color feliz y te repites eso que tan bien sabes pero que casi siempre olvidas. Eres lista, eres guapa, eres importante. Y aquello otro… ¿cómo era? Ahhhh, sí: no soy yo, eres tú el que ha fallado.


    Io*

domingo, 13 de marzo de 2016

Quiero hablarte a la cara

Podría contarte que nadie me ha abrazado como tú, y eso que han sido tan pocos los que me has dado, pero sigo sintiendo el contacto de tu piel con la mía, y éso...... éso no es fácil de olvidar. También podría decirte que nadie me ha enganchado como tú....

Nunca sabrás, ni imaginártelo puedes, lo que significa una caricia tuya para mi piel, ver como te acercas.... o acercabas, mientras yo ya me iba poniendo tensa, incapaz de corresponder a nada; cómo me arrepiento de todo ello, no te haces una idea, porque hueles a ese para siempre que yo no suelo decir nunca, porque eres esa persona con la que me encanta hablar, pero que no me habla.

Pero.....qué pasaría si te da por volver? No sé tú, pero creo que yo esta vez te daría respuesta a todas  aquellas preguntas que callé sin querer. Te miraría a los ojos y sin rodeos lo diría, para no arrepentirme otra vez. Detendría el tiempo en cada uno de los momentos que desprecié al despedirnos, porque lamento cada maldito segundo que derroché inútilmente, ignorando que algún día te cansarías y te perdería. Y lo irónico es que hoy daría tanto por recuperar cada uno de esos momentos, la confianza, para poder perderme de nuevo en tu mirada, o tan siquiera un sólo instante......, para volver a verte como antes.

Que te guste alguien que tiene pareja es complicado, quién no ha pasado alguna vez por esta situación? Caminar por el desfiladero de la ética y de los principios nunca es tarea fácil. Ves como tus valores se marchitan por hacerle caso a las voces de tu corazón, y éso puede convertirse en una sensación muy desagradable. Es lícito querer intentarlo, aunque parezca estar fuera de lo correcto o conveniente, pero..... ¿hay que dejar escapar a esa persona con la que quieres estar por respeto a su situación o hay que taparse los ojos e intentarlo sin que te importe el daño que puedas provocar? Difícil situación.....

Tan lejos y tan cerca...., como enero y diciembre

    Io*

domingo, 6 de marzo de 2016

Alegre o triste.....Quién lo sabe?

"En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero......", así empieza la obra más representativa de la literatura, y hasta ella me recuerda tanto a ti, porque ha sido un honor que comparases mis textos para ti con esta obra maestra.

Sigo sin entender que está pasando; no sé por qué parece que te estás guardando para ti algo que no quieres compartir conmigo. 5 años desde que nos conocemos y no sé si para ti habrá sido agradable o si alguna vez te he hecho sentir a gusto, si te has sentido bien conmigo, yo he intentado hacerte sentir el más especial de este aburrido pueblo aunque lo único que haya conseguido haya sido agotar tu paciencia. 

Me encantaría saber qué es para ti un abrazo! ésos que dijiste que ya no vas a volver a regalarme porque ya me diste muchas oportunidades. Para mi, igual tiene un significado diferente, por éso, quizá, he sido incapaz darlo; porque me da miedo tocarte sabiendo que luego te irás. No quiero un abrazo para ver si yo soy capaz de devolvértelo, no!, yo quiero o quisiera que lo hicieses cuando no lo espero, fuerte y que aprietes, de ésos que reconstruyen, de los que no quieren soltar.

No te voy a mentir, no voy a hacerlo ahora porque sería insensato; te pienso mucho, incluso en mis pensamientos más íntimos, más de los debido, más de lo que podría o debería contigo; porque si querer es poder, yo te puedo mucho y sigo echándote de menos aunque te vea casi cada día, porque ésto no es cuestión de tiempo sino de distancia.

Yo sólo deseo que volvamos a conocernos, a hablar, regresar a las conversaciones sin sentido de madrugada, que vuelvas a decirme cosas para que yo te diga "cositas", para que regrese la ilusión de hablar todos los días, para que me vuelta a ruborizar; volvamos al inicio, cuando aún no sabía que terminaría queriendo así......

Yo pienso que las personas no se olvidan. No puedes olvidar a quien un día te hizo sonreír, a quien te hizo latir el corazón o quien te hizo llorar por horas enteras; las personas no se olvidan. Puede cambiar el modo en que las vemos, o el lugar que ocupan en nuestro corazón o en nuestra vida. Hay personas que han sacado lo mejor de mi y ahora entre nosotros sólo hay un simple "hola". Aunque hoy sólo quede una sonrisa o ese hola, siempre serás parte de mi vida. Yo no olvido a nadie; no olvido a quien ha tocado mi mano al menos una vez en mi vida, porque si lo ha hecho, significa que el destino ha querido que nos encontrásemos en este camino.

¡Manos arriba, vamos a jugar a tocar el cielo! No sé si parezco feliz, pero ser y parecer algo no es lo mismo. Y a menudo me pregunto si todas las palabras que se nos han quedado en la punta de la lengua hubiesen cambiado nuestra vida de haberlas dicho a tiempo.

Ahora sí que me apetece un abrazo con todas las ganas!!!!! Menos importancia al que dirán y más importancia a lo que realmente nos apetece. Debería saber apreciar las cosas que me hacen sentir bien, feliz o especial por si no tengo el placer de volver a disfrutarlas nunca más, porque nunca sabemos cuando se pueden ir de nuestra vida para siempre; y cuando digo cosas me refiero también a momentos, lugares y, por supuesto, personas; especialmente a ti.

     Io*