Vistas de página en total

lunes, 26 de marzo de 2012

Pasar página

Cuando crees que el sol ya no volverá a salir, cuando te sientes atrapada en un enorme túnel, oscuro, frío, vacío, donde sólo escuchas ruidos que ni tan siquiera sabes de donde provienen, es tan bonito empezar a vislumbrar un pequeño haz de luz, aunque sea a lo lejos, pero que te llena de alegría y esperanza, soñando con que quizá sí, todo pueda llegar a cambiar, a mejorar, a ser como de verdad te mereces. Algo bonito.

Sentir es maravilloso. Te hace recordar que estás viva, que el corazón te palpita dentro, a ritmos acelerados y lentos a la vez, te hace estar activa mentalmente, siempre buscando “recursos” para llevar a buen puerto nuestro deseo, nuestro sueño.

A menudo nos sorprendemos cuando, aparentemente, de la noche a la mañana, empezamos a ver a una persona de manera distinta. Cuando ni tan siquiera nos habíamos fijado en que tal ser existía. Sí, estaba presente, pero ni en sueños había pasado esa idea por la cabeza.

Las historias son como los libros. Pasamos cada una de sus páginas, esperando poder aprender todo lo que podamos de cada una de ellas, y no tener que volver a atrás a releerlas. Una buena amiga y yo misma estamos en esa tesitura. Creo hemos conseguido pasar esa página que tanto nos ha costado, para encontrarnos en la siguiente a algo que nos gusta, que nos ha sorprendido y que nos apetece disfrutar.

Cuando todo lo que le ocurra a él te importe, es cuando ese chip imaginario, ha sido activado. A partir de ese momento, más de la mitad de tu vida gira en torno a él, lo que hace, lo que piensa, lo que quiere.

Sentirse ilusionada, saber que hay alguien que piensa en ti, que quiere verte, compartir su tiempo contigo, seguir conociéndote, te hace estar de mucho mejor ánimo, enfrentarte a la rutina diaria con una sonrisa, dejando a atrás los agobios.

Las ilusiones son como todos y cada uno de los días: cuando parecen que se van apagando, zas!!!! el sol vuelve a brillar, si cabe aún con más fuerza que el anterior, llenándote de energía positiva, renovándote, haciéndote sentir más fuerte y con ganas para empezar lo que se ponga por delante.

Mi querida “Murron”, te deseo,  en esta etapa, muchísima suerte. Déjate llevar, no caigas en los mismos errores que anteriormente; disfruta de cada momento, de cada palabra, de cada mirada; pero recuerda: mantén siempre los pies en la tierra.  Yo siempre estaré esperando noticias, alegrándome por tus éxitos.

Besos mil.

Io*

No hay comentarios:

Publicar un comentario